De logotipo a símbolo de interés cultural

Aunque la imagen principal que aparece en este nuevo post en la de un toro no entro en temas taurinos. Cosa que respeto aunque no es de mi agrado.

Pues toros aparte, de lo que hoy quiero hablar es de cómo un signo publicitario puede llegar a formar parte de la cultura de un país.

 Antes de empezar quiero recordar la definición de logotipo: “elemento gráfico que identifica a una persona, empresa, institución o producto”

Hace ya algunos años, cuando estaba estudiando, hice un viaje a Madrid para ver una exposición sobre 100 años de diseño gráfico español, “Signos del Siglo XX” en el Museo Reina Sofía. La verdad es que para mí fue impactante. De hecho basé mi proyecto final de carrera en estos signos.

Bien pues, había un diseño de cada año desde 1900 a 1999. Lo que más llamó mi atención es que la gran mayoría de diseños expuestos se seguían utilizando en la actualidad. Aquí descubrí que, un buen diseño perdura por más años que pasen.
Pues entre todos estos diseños que se quedaron en mi memoria, hoy me he decidido por hablar de uno específico y muy reconocido. El Toro de Osborne.

Como bien sabéis el Toro de Osborne no es ni más ni menos que una valla publicitaria como las que vemos constantemente por las carreteras. Pero hoy en día es impensable que una de estas vallas se convierta en un icono de un país. Vamos, ni de coña!!
El diseño de esta valla fue encargada en 1956 al artista Manolo Prieto. La primera valla que se realizó fue en cartón pero con el paso de los años cambiaron el cartón por la chapa metálica y fueron haciéndolo un “pelin” más grande. Hasta llegar a los 14 mts!!

Este símbolo gráfico se convirtió en parte del paisaje español. Yo recuerdo cuando era pequeña, ir por la carretera y alucinar con la valla del toro. Igual veías arboles, casas… y de repente, el Toro!

En los años 90 se ordena retirar todas las vallas publicitarias, incluida la del Toro y (aquí viene lo impensable para un diseñador) numerosos municipios, asociaciones culturales, artistas, medios de comunicación, políticos etc se manifiestan a favor de seguir manteniendo la valla del toro. Hasta que en diciembre de 1997 el Tribunal Supremo dicta sentencia a favor del mantenimiento de los toros de Osborne debido al «interés estético y cultural» que se les ha atribuido.

¿Cómo un logotipo marca puede llegar a esto?? He leído que Manolo Prieto, diseñador del Toro de Osborne comentó que después de tantos trabajos realizados sólo se le recuerda por el Toro, pero…. ¿Cuántos diseñadores querrían que alguno de sus diseños se convirtiera en un símbolo de interés cultural???? Creo que más de uno mataríamos por esto!

Como pasa en muchos casos llega un punto en el que el diseño original se desvirtúa y aparecen aplicaciones “erróneas”. En la actualidad vemos el Toro en millones de objetos de merchandising dirigido a “guiris”.

Pero a pesar de esto, no hay que olvidar que este diseño fue creado hace más de 60 años y ha pasado de ser un logotipo a todo un símbolo de interés cultural.